5 juegos divertidos para niños de 6 meses
En los primeros seis meses la vida del bebé ha evolucionado de forma vertiginosa. Desde su nacimiento, el niño ha duplicado el peso de su cerebro y el desarrollo de sus habilidades se encuentra en un punto crucial. Comienza a descubrir cosas y mediante el juego comienza a darse cuenta de todo lo que le rodea. Por eso, es común que en esta época un hecho que se produce en la mayoría de los bebés es cuando se le cae un objeto, y le llama la atención, a partir de ahí, repetirá incansablemente esta acción para conseguir el mismo sonido o movimiento que le llamó la atención. Está empezando a darse cuenta de que sus acciones tienen consecuencias y que tiene control sobre los objetos.
Además, durante esta época aumentan sus gestos, sonrisas y carcajadas. Es un momento clave para que el niño vaya adquiriendo habilidades importantes para su desarrollo y para ello conviene acompañar al bebé en este proceso con todo el amor y alegría posible para que el pequeño crezca sano y feliz. Hablar al bebé, de forma clara y afectuosa, también le ayudará a hablar antes y mejor y de esta forma irá poco a poco sustituyendo el lenguaje gestual por el verbal.
En este momento comienza a identificarse con los demás: el niño puede interiorizar las actividades del otro y sentirlas como suyas manifestando alegría, mal humor, miedo, ira o desagrado. Es la formación de lo que llamamos temperamento.
Alégrate de las habilidades que vaya logrando y expresa tu alegría con entusiasmo, es la forma más acertada de que tu hijo se convierta en un niño feliz, seguro de sí mismo y sociable. Y sobre todo, juega. El juego es la forma que tienen los niños de relacionarse con los demás y consigo mismos. Te mostramos 5 divertidos juegos para disfrutar con los pequeños y ayudarles a desarrollar sus habilidades.
- Cucú-tras. Es el momento de empezar con juegos que tienen como objetivo preparar al niño para la independencia. Se trata que de forma lúdica el niño vaya dándose cuenta de que es un ser separado de la madre. Podemos empezar cogiéndolo en nuestros brazos (con su espalda apoyada totalmente en nuestro pecho) y situándonos frente a un espejo. Y de forma tranquila y relajada aparecer y desaparecer del espejo diciendo el famoso ‘Cucú-tras’.
- Experimentar con materiales que pueda tocar. Bandeja con pan rallado. Alrededor de los 6 meses los niños desarrollan mucho sus capacidades manuales. Existe una relación directa entre el desarrollo manipulativo y el intelectual. Sus manos lo dicen todo y nos hablan de cómo se está desarrollando el bebé. Es la época en la que el bebé trata de agarrar, soltar, tira y coge cosas. Por esta razón, todos los juegos que le ofrezcamos y donde participen sus manos y sus dedos serán una buena forma de ayudarle para su desarrollo intelectual. Utiliza una bandeja y llénala de pan rallado. Así no habrá peligro si se lleva algo a la boca. Déjale experimentar y ponle dentro algún muñequito enterrado. Para este juego es preferible que el niño esté en pañal para que así pueda tocar el pan con más cantidad de piel y le dará nuevas sensaciones. Siempre bajo la supervisión de un adulto.
- Juguetes que rueden y hagan ruido. Los niños alrededor de esta edad necesitan estar el mayor tiempo posible en movimiento, por lo que conviene que estén en un sitio cómodo y confortable, donde tengan espacio y siempre que se pueda estén en el suelo. Se puede comprar una manta de actividades, pero con el paso del tiempo la conocen también que hay que estimularlos con otro tipo de juegos. Existe en el mercado pelotas de plástico duro que llevan en su interior otra pelota. El balanceo de las dos pelotas hace que el juguete llame poderosamente la atención. También se pueden encontrar pelotas de tela que llevan un cascabel dentro. Se trata de buscar un juguete que él pueda agarrar con sus manos, lanzarlo, golpearlo y que al hacerlo se desplace y emita ruido.
- El pregateo. A partir de los 6 meses los bebés empiezan a prepararse para el gateo. El gateo es una etapa muy beneficiosa para los niños ya que favorece el desarrollo global y sobre todo el visual de los pequeños. Los ojos participan de forma armónica durante el gateo y esta etapa es imprescindible para conseguir una visión tridimensional correcta. Con el gateo los dos hemisferios del cerebro empiezan a intercomunicarse y las conexiones cerebrales que se producen con este movimiento ayudan a una correcta coordinación visiomotora que ayudarán al desarrollo manipulativo y por lo tanto cerebral. Ojos, manos y cerebro están conectados. Intenta que el niño gire para ello túmbalo boca abajo en una superficie cómoda y que le permita moverse con facilidad. Sitúa un juguete que le guste a unos 25 cm de distancia a su derecha o izquierda, de tal modo que para alcanzarlo tenga que moverse un poco. Ajusta la distancia a la capacidad de movimiento que tenga el niño. Se trata de que el bebé mueva sus extremidades para ir cogiendo fuerza y controlando el movimiento.
- Palmas, palmitas. El bebé comienza a jugar con su voz. Emite ruiditos y comienza el balbuceo. Son sus primeros ensayos del lenguaje. Es importantísimo que le fomentes y le animes. No le regañes porque está en su cunita solo parloteando y tiene que dormir. Permítele que lo haga, ya que es fundamental para su desarrollo. Intenta hablarle mucho y cántale canciones que impliquen la realización de algún movimiento. Canciones tradicionales como ‘Cinco lobitos’ o ‘Palmas, palmitas’ son buenos ejemplos. Intenta siempre hacer los mismos movimientos para que el bebé los vaya interiorizando.
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