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Juegos para disfrutar con tu bebé al aire libre

Niña jugando con pompas en el parque

El contacto con la naturaleza: clave para su desarrollo
Ahora, en verano, es la época ideal para disfrutar con los niños de las actividades al aire libre. Desde los primeros meses es importante que los niños disfruten de los juegos de exterior y de realizar actividades físicas. Estar en contacto con la naturaleza es clave para su desarrollo y también para su salud. Los juegos de exterior fomentan su creatividad y su imaginación, pero además, les provee de habilidades psicomotrices fundamentales para su crecimiento y refuerzan el vínculo con los padres o cuidadores de referencia.

La Asociación Española de Pediatría (AEP) señala que “la actividad física debe alentarse ya desde el principio, por medio de juegos en el suelo o en el agua”. En este sentido, es fundamental que a los bebés se les deje en libertad controlada, dejando que muevan pies y manos. Actividades como tirar, empujar, buscar objetos, el gateo y los primeros pasos son parte de su desarrollo. Los beneficios son muchos. Te contamos cinco juegos de exterior puedes hacer con los más pequeños.

 
Cinco juegos para disfrutar al aire libre:

  • Pompas de jabón. Un clásico del verano. A los niños les encanta y además les refresca en los días muy calurosos. Jugar con las pompas es sinónimo de alegría y risas. Además, es muy positivo porque desarrolla su visión y su situación espacial, al fijarse en las pompas e intentar alcanzarlas.
  • Nubes para fomentar su imaginación. Las nubes pueden ser una gran fuente de inspiración para la creación de historias y canciones. Los cuentos, las canciones y las repeticiones juegan un papel muy importante en el desarrollo del bebé y en su aprendizaje. Con este sencillo juego los niños disfrutan y se fomenta su creatividad. Juega a buscar animales u objetos escondidos en las nubes.
  • Juegos con la pelota. Estos juegos pueden y deben estar presentes desde los primeros meses. Incluso cuando el niño aún no sabe sostenerse. Ponerle una pelota de tela y de colores para que intente darle con los pies le estimula el movimiento y sin duda le divertirá. Luego, cuando ya son un poco más mayores se pueden usar pelotas de gomaespuma para que coja fuerza en las manos, o para lanzársela y la coja. Es un clásico para niños y niñas que les ofrece grandes beneficios.
  • Castillos de arena. Ya sea en la playa o en un arenero. Jugar a construir y destruir castillos es un juego que no puede faltar en verano. Son juegos que favorecen su imaginación, les entretiene y ayudan a desarrollar su motricidad fina. Con tan solo cubos, palas, vasos y rastrillos se puede desarrollar un juego con múltiples beneficios.
  • Juegos exploratorios. Desde que los bebés comienzan a gatear se convierten en grandes exploradores. Les encanta desplazarse, coger las cosas, tocarlo todo y conocer todo aquello que les rodea: sus texturas, sus olores, colores e incluso sabores. Dejarles moverse en libertad, siempre y cuando no haya peligro es una actividad que les llenará de gozo y fomentará su desarrollo. Dejarles tocar hojas, árboles, escalar pequeños promontorios… todo lo que esté a su alcance es una fuente de placer y descubrimiento.
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