La llegada de los dientes de leche: cómo aliviar al bebé
Cuidar los dientes desde que aparecen
Alrededor de los seis meses aparecen los primeros dientes. Estos, denominados de leche, son temporales; sin embargo, tienen una gran importancia en el desarrollo dental tanto presente como futuro. Los dientes de leche son las primeras piezas dentales, que serán sustituidas con los años por las definitivas. Son menos piezas, en total veinte, 10 arriba y 10 abajo, mientras que la dentición definitiva se compone de 32 piezas.
La importancia de cuidar la dentadura de leche
Existe la creencia popular de que los dientes de leche, al ser temporales, tienen poca importancia; sin embargo, según indican los odontopediatras deben cuidarse como si fueran definitivos.
Te contamos por qué son importantes y cómo cuidarlos para tener una dentadura sana en el futuro:
- Los dientes tienen como función principal morder y masticar la comida y cumplen un papel importante para el lenguaje, ya que son claves en la pronunciación de los sonidos.
- Son una guía para los dientes permanentes y configuran el espacio que luego necesitarán éstos en el futuro. Si los dientes de leche se mantienen sanos, sin caries, los definitivos nacerán sanos. Sin embargo, una infección que afecte a la raíz de los dientes de leche puede traspasarse a los dientes permanentes porque se queda una bolsa de pus que luego heredará el diente definitivo.
- Las muelas de leche pueden permanecer en la boca bastantes años, algunas hasta los 12 años, cumpliendo su función hasta la llegada de las definitivas.
- Si existe una mala salud de los dientes de leche se pueden producir infecciones que causen dolor o incluso pérdida de alguna pieza.
Cómo sabemos si le están creciendo los dientes
La dentición es el proceso por el cual los dientes emergen a través de las encías. Por norma general, es un proceso que suele causar dolor y molestias ya que se inflaman las encías hasta que el diente emerge a través de las encías. Sin embargo, no todos los bebés tienen los mismos síntomas.
Te contamos a continuación algunas de las molestias más habituales:
- Las encías se enrojecen y se inflaman.
- El bebé tiene ganas de morder para calmar las molestias.
- Tiene las mejillas sonrojadas.
- Babea por el exceso de saliva.
- Se muestra irritable.
- La dentición puede afectar al sueño (se despiertan durante la noche o les cuesta dormirse) y al apetito (rechazan la comida).
Cuando las molestias persisten o se tienen dudas, lo más acertado siempre es acudir al pediatra que indicará qué hacer en cada caso concreto.
Consejos para aliviar las molestias
Si el niño está en pleno proceso de erupción y tiene molestias podemos intentar aliviarle hasta que el diente salga a la superficie y la inflamación baje. Estos son algunas recomendaciones:
- Ofrécele cosas frías. El frío adormece la encía y calma el dolor. Alimentos como el plátano refrigerado, rodajas de pepino… pueden ayudarle. Puedes usar un chupete de malla para introducir un alimento helado y que vaya chupando. Eso sí, siempre bajo la supervisión de un adulto.
- Masajea sus encías con una gasa limpia. La presión puede ayudar a aliviar su incomodidad.
- Los mordedores le ayudan a aliviar su malestar ya que pueden morder sin hacerse daño.
- Evita los geles para la dentición que contengan benzocaína o lidocaína, ya que no son seguros para los bebés.
Si las molestias son intensas consulta con el pediatra sobre el uso de algún analgésico infantil y su uso. La dentición es un proceso natural que todos los bebés experimentan. Con paciencia y los cuidados adecuados, tú y tu bebé podrán superar esta etapa de una forma más tranquila.
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